El verano y el calor no solo simbolizan una estación más del año, sino que también significan un cambio de armario. Nuestros pies desde luego que son los que más lo sufren, y por eso es importante llevar un calzado abierto y dejarlos respirar.
Este año ya se han dejado ver unas cuantas tendencias de zapatos, de las cuales hemos recogido las esenciales en este artículo.
En primer lugar, tenemos las flatform. Estas, haciendo referencia a su nombre en inglés, se tratan de zapatos de plataforma que no cuentan con la tradicional forma de la cuña o del tacón, sino que se mantienen planos. Aunque siempre proporcionando cierta altura. Desde luego las flatform son de las opciones más cómodas esta temporada, ya que el pie no sufre demasiado al evitar la inclinación del mismo.
El carácter cíclico de la moda se ha reflejado de manera más evidente en las llamadas chunky flip flops, las cuales se remontan a los años 90. Este zapato consiste, como dice su nombre, en unas chanclas de dedo pero con plataforma, de ahí el término chunky. Aunque son muy bonitas y vienen en un montón de colores, no son la opción más viable si vas a caminar demasiado.
Hablando de las chanclas de dedo, otra tendencia este verano son las sandalias de dedo. Las más populares van acompañadas de un diseño a tiras que cubre el pie. Este modelo es ideal para darle un toque más arreglado a tu look.
Asimismo, los kitten heels que aparecieron hace unos años continúan siendo populares. Este tipo de tacón se caracteriza por su tamaño pequeño, el cual proporciona muy poca altura. Estos zapatos no resultan muy incómodos, ya que el tacón apenas inclina el pie y, además, son una buena forma de salir de otras formas más vistas de tacón.
La última de las tendencias, que hace un retorno a nuestros armarios, son las bailarinas. Si bien hacía unos años que este modelo pasaba desapercibido, este año se hace de notar. Si eres fan de los zapatos planos, este es tu zapato ideal.
Y tú, ¿qué zapatos vas a llevar este verano?
Por Julia Cortés
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