Da comienzo una esperadísima gala de los Oscar después de un año muy complicado para la industria del cine. Empieza con una entrada espectacular en plano secuencia de la presentadora de la gala Regina King y mencionando en su discurso de apertura la sentencia en Mineápolis por el asesinato de George Floyd.
Una gala marcada
por grandes novedades audiovisuales como los planos, la tipografía o incluso la
forma de presentar cada categoría. Una ceremonia íntima, mucho más emotiva que
deja a un lado la clásica excentricidad de Hollywood y adquiere un aspecto
mucho más cercano y calmado. Sin duda, mucho más refinada que los previos globos
de oro y marcado por el clásico de los discursos largos.
Con respecto a
los galardonados, no ha habido muchas sorpresas dentro de las principales
categorías. Nomadland, una de las grandes favoritas de este año, se
coronó como la indiscutible ganadora tras obtener tres de sus seis nominaciones.
Mejor dirección a Chloé Zhao, que hace historia y se convierte en la segunda
mujer en ganar en esta categoría. Mejor actriz principal para Frances
McDormand, también productora de la película. Consigue así su tercera estatuilla posicionándose
entre los actores más galardonados como Meryl Streep o Jack Nicholson. Por último,
se llevó el reconocimiento a mejor película.
Esta obra es un homenaje
a la américa de 2009 tras la crisis económica que azotó al país y dejó a tantas
personas en la calle. Una representación del nomadismo contemporáneo. Ganadora
también en el festival de Venecia. Obtuvo críticas y abrió muchos debates por su
imparcialidad a la hora de adentrarse en un mensaje más político. Sin embargo, la
directora dijo que buscaba la faceta más humana y que la historia se centrara en
las personas que forman parte de esa comunidad nómada del siglo XXI.
El premio a mejor
actor principal ha sido para el veterano Anthony Hopkins, que a sus 83
años se ha hecho con la estatuilla. Fue sin duda la mayor ausencia de la gala y
sin representación en la recogida de su Oscar.
Tras el enorme
éxito el año pasado del cine asiático con la película Parásitos, este
año también ha resaltado la calidad del cine coreano con la ganadora del premio
a actriz de reparto Yuh-Jung Youn por Minari. Que ha sus 73
años se hizo con la estatuilla compartiendo categoría con actrices como Olivia
Colman o Glenn Close.
Otro de los
favoritos Daniel Kaluuya obtuvo el Oscar por su interpretación en Judas
y el Mesías negro. Su primer galardón tras haber estado nominado por su
papel en la película Déjame salir.
Dentro de las
demás categorías cabe destacar el premio a mejor película de animación para Soul.
Uno de los premios más cantados tras su previa victoria en los Globos de Oro.
Su estreno tuvo polémica al haberse estrenado en plataformas (Disney +) sin
haber pasado por la gran pantalla. Algo que han reivindicado en la gala de este
año actrices como Laura Dern y Reese Witherspoon la necesidad de fomentar la
vuelta a los cines y la experiencia de ir a ver las películas en las grandes
salas. Soul se alzó también con el galardón a mejor banda sonora
consiguiendo así su segundo premio.
La sucesora de Parásitos
en la categoría de mejor película extranjera ha sido Another round,
una producción danesa que ya habría arrasado en los festivales de Cannes y de San
Sebastián.
Como mejor
documental Mi maestro el pulpo, una producción de Netflix y uno
de los grandes favoritos, se alzó como ganadora sobrepasando a la producción
española del documental El Agente Topo.
La ceremonia ha
estado marcada por las medidas sanitarias correspondientes y también la aparición
de una nueva categoría ‘humanitarian award’ (premio
humanitario) en la que han reconocido la labor de dos organizaciones que
han estado ayudando durante la pandemia tanto a la industria cinematográfica como
a las comunidades con menos recursos.
Por Irene M. Chinea
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