Como ya hemos tratado anteriormente en este blog, hoy vamos a añadir un nuevo término millenial acuñado a un comportamiento que está siendo cada vez más común en el mundo de las citas. La revista InStyle publicó hace unas semanas un artículo explicando un nuevo concepto que se está popularizando dentro de las relaciones.
Pongamos la situación de que quedas con alguien en una cita y a la hora de estar con esa persona sabes que no le vas a volver a ver nunca, ya sea por su forma de ser o por cómo te estás sintiendo tú con esa persona. Sin embargo, una vez acabada la cita, regresas a casa sintiendo esa necesidad de volver a verla, incluso recibir un mensaje te hace ilusión.
Ese sentimiento tan ambiguo es cada vez más típico entre los jóvenes que se sienten ansiosos y reacios al compromiso. Este término se llama ‘temperature checking’, comprobación de la temperatura.
La comprobación de la temperatura es, aunque problemática, una forma de aliviar esos sentimientos que se producen cuando no estás seguro de cuál es tu posición con una relación actual, o te encuentras acercándote a la última salida antes de lanzarte a una nueva relación. Cuando te enfrentas al compromiso, puede parecerte la mejor solución huir y regresar a tu zona de confort.
Comprobar la temperatura puede ser cualquier cosa, desde textos con un ex hasta una última pasada por las aplicaciones de citas para un encuentro relevante con otra persona, y así poner a prueba la facilidad con la que se puede cambiar de pensamiento. Realmente es una técnica para "comprobar la temperatura" de tus sentimientos hacia la persona con la que sales y averiguar si son reales o no:
¿Me gusta esta persona o simplemente odio estar solo?
"Cuando llegamos a conocer a alguien pero no estamos seguros de lo que sentimos por él, o de lo que él siente por nosotros, puede crearse una sensación de malestar o ansiedad", dice la doctora en psicología Jessica January Behr y fundadora de una consulta privada especializada en terapia individual y de pareja.
"Este 'retroceso' o 'temperature checking' puede ser una forma de trabajar con esa ansiedad, que puede ocurrir de muchas maneras diferentes y no siempre tiene el mismo razonamiento psicológico", explica. "Para algunos, volver a las aplicaciones o comunicarse con un antiguo interés romántico puede ayudar a reconstruir un sentido de deseabilidad personal, perdido o reducido en la relación actual. Puede reafirmar el atractivo, la confianza o la valía de uno mismo cuando se siente inseguro o insegura su posición en la relación en ciernes”.
“Para estas personas, la comprobación de la temperatura tiene que ver más con la autoevaluación que con la evaluación de la pareja”. Para otros, volver a sumergirse en la piscina de las citas puede reflejar dudas sobre la persona con la que están saliendo o un deseo de determinar si hay alguien más por ahí más adecuado para ellos” concluye la doctora Behr.
Este pensamiento de si la persona con la que estamos saliendo o a la que estamos conociendo nos gusta de verdad, puede generar mucha frustración ya que dudamos continuamente de nuestras acciones y sentimientos y ponernos a prueba a nosotros mismos quizás no sea la mejor de las soluciones, pero es una técnica para afianzar nuestras decisiones.
Hecho por: Irene M. Chinea
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