Hoy en día, afortunadamente, los juguetes sexuales ya no son un tabú, y se han convertido en el complemento perfecto del sexo, tanto en pareja como a solas. Muchas personas ya cuentan con uno, pero si aún no te has atrevido, ¡aquí te traemos 5 cosas que debes saber antes de comprarlo, y que te ayudarán a dar el paso!
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La calidad es esencial
Lo primero que debes saber es que cuando se trata de este tipo de productos, la calidad es muy importante. Puede que los productos te resulten caros, pero la realidad es que un material de mejor calidad es esencial para evitar roturas, infecciones, daños o la acumulación de bacterias. Además, un producto de buena calidad nos durará más, siempre que lo cuidemos como es debido, por lo que adquirir uno más barato podría salirnos caro a la larga.
‘Sex tech’ o tecnología sexual
La tecnología ya abarca todos los aspectos de nuestra vida, y el sexo no es una excepción. Los avances tecnológicos han permitido que los juguetes eróticos sean más fáciles de usar, más seguros y adaptados a nuestra vida.
El diseño importa
La estética de los juguetes es importante. Aunque en un principio nos pueda parecer una tontería, nada más lejos de la realidad. El diseño es fundamental, porque no solo va a permitirnos un uso más sencillo y manejable, sino que también influye enormemente en nuestro deseo de usarlo.
Tipo de estimulación
Un aspecto que debes tener muy en cuenta es el tipo de estimulación que buscas. Las opciones son muy amplias. En el caso de las personas con vagina, es posible elegir entre estimulación vaginal, clitoriana o mixta. Por otra parte, las personas con pene pueden optar por anillos vibradores, masajeadores prostáticos y un largo etcétera. También existen opciones específicamente para parejas, como los anillos vibradores con estimulador de clítoris, por ejemplo.
Cuidados.
Por último, y no menos importante, debemos tener en cuenta las necesidades de cuidado del juguete que compremos, ya que es esencial para mantenerlo en buen estado y para evitar infecciones u otros daños en nuestra salud sexual. Además, es recomendable utilizar lubricantes a base de agua, tanto para nosotros como para mantener la silicona del producto; y lavarlos con agua y jabón después de cada uso.
Por Marina Pardo.
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