El grupo formado por Gabriel de la Rosa, Daniel del Valle, Erlantz Prieto, Ander Cabello y Joshua Froufe llenó en su segunda noche la sala La Riviera en Madrid, añadiendo la etiqueta sold out a otro de sus shows de la gira.
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| Gabriel de la Rosa en el escenario de La Riviera || Miranda Lores © |
En la Riviera, las puertas del público abrieron a las 19.30. Todavía quedaba hora y media para que la música de Shinova retumbara en el recinto, pero la espera no parecía importar. Grupos de amigos y parejas charlaban, acudían al bar y cantaban las canciones que sonaban de fondo, mientras en la sala hacía cada vez más y más calor.
De pronto, una cuenta atrás apareció en la pantalla del escenario, que fue recibida con coros y vítores del público. Con la cuenta a cero, comenzó un juego de luces y música en la pantalla, que hacían resplandecer la sala y, uno por uno, Shinova salía a tocar por fin.
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| Cuenta atrás antes de que saliera Shinova || Miranda Lores © |
El show comenzó con su tema ‘El Álbum’, de su disco de 2018 Cartas de Navegación. La gente cantaba con casi la misma energía que el grupo desprendía en el escenario, y Gabriel comenzó a dar saltos con micrófono en mano.
La segunda canción no pareció dejar a nadie indiferente, ‘Niña Kamikaze’ sonaba a gritos por parte del público, estableciendo el tono que tomó el concierto esa noche: un festival de alegría. Para mayor interacción del público, con los primeros acordes de ‘Solo ruido’, Gabriel pedía que acompañaran con palmas la canción: “¡Esa percusión!”, dijo por el micrófono.
Después de un inicio más que dinámico, Gabriel tomó un descanso de los brincos y el setlist para dirigirse a todo el mundo que había ido a “celebrar la música”, como dijo él. También aprovechó para mostrar su gratitud después de los dos sold outs en Madrid: “Gracias, no podemos decir más”.
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| Gabriel de la Rosa en el escenario de La Riviera || Miranda Lores © |
La celebración de la música no había hecho más que empezar, y el grupo retomó este comedido con su tema ‘Doce meses (El año del maravilloso desastre)’ de su álbum de 2016 Volver. Sin parar quietos, Shinova volvía a conseguir un coro unánime del público en una canción más romántica.
Continuó el repertorio con una mezcla de lo último del grupo, como fue el caso de ‘Gigantes’, ‘Palabras’ o ‘Puedes apostar por mí’, de su álbum más reciente que da nombre a su gira La buena suerte; pero tampoco se olvidaron de hacer referencia a sus trabajos anteriores con temas como ‘Cartas de Navegación’, ‘Lo que fuimos’ o ‘Volver’. Todo ello acompañado de juegos de luces, que variaron desde el azul más frío hasta el amarillo, pasando por un rojo intenso.
El concierto estaba siendo un éxito total. El público cantaba cada una de las canciones que el grupo iba tocando y continuaron con temas como ‘Mi vida sin mi’ y ‘Si no es contigo’, hasta llegar a una parte en la que pidieron ayuda del público y fue en la canción ‘Que casualidad’.
“Con esta canción vamos a necesitar vuestras luces porque no os vemos desde aquí. Vamos a hablar del recorrido de máxima penumbra y el primer hilillo de luz” - Gabriel de la Rosa.
Y fue así, como la luz de esta canción dio paso a uno de los momentos más esperados de la noche: el invitado especial. Gabriel daba paso a Antonio García, cantante de Arde Bogotá, que se subía al escenario para cantar ‘Para cambiar el mundo’. Los asistentes se dejaron las cuerdas vocales recibiendo al cantante invitado y no pudieron evitar saltar mientras acompañaban a los dos artistas en la melodía.
El público se despedía de Antonio García vitoreando y aplaudiendo y rápidamente empezó a sonar ‘Mirlo Blanco’, del álbum Cartas de Navegación y cuyo estribillo es más que pegadizo. Al terminar salieron del escenario y los asistentes ante las ganas de volver escuchar al grupo empezaron a cantar el estribillo de ‘Mirlo Blanco’ para que estos volvieran. Y lo consiguieron.
Pero el grupo hizo algo que si bien, muchos ya sabían, otros se sorprendieron. Y es que llegaba una de las partes más especiales del show, ‘Ovnis y estrellas’. En esta parte, Gabriel se pone en el centro del público mientras canta esta canción tan especial.
El show continúa con las últimas canciones y es que en algún punto tiene que terminar. Pero ninguno de los asistentes parece haberse saciado y aprovechan cada segundo de las próximas canciones como si fueran los últimos minutos de vida. Suena en La Riviera ‘Expectativas y espejismos’, su típica y famosa canción ‘La sonrisa intacta’ que según Gabriel de la Rosa y Daniel del Valle no recuerdan un concierto donde la hayan cantado.
‘Ídolos’ retumba en la sala y el grupo da paso a la guinda del pastel de este concierto: ‘Te debo una canción’ y es que a Madrid le deben más música, y su público se lo ha hecho saber durante estas dos horas mágicas. El grupo salía a saludar juntos al público y a agradecer esta noche mágica y llena de vida que habían podido vivir por segunda vez.
Si no te quieres vivir un show de ‘La buena suerte’, aquí os dejamos las próximas fechas para que podáis disfrutar de Shinova:
Por Miranda Lores y Julia Cortés.
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